Alex pensó lo siguiente...
tomado de
http://bloc.mundoejecutivo.com.mx/articulos.php?id_sec=18&id_art=196por: Jeancarlo Aldana
Si quieres vivir de la música y todavía no sabes cómo, esta breve revisión te dará ideas para capitalizar tus esfuerzos y convertir tu pasión en un negocio prominente
Durante años, la industria musical se ha visto afectada por circunstancias adversas que la han colocado en uno de sus más difíciles momentos. Alianzas desesperadas, ventas a la baja, sueldos estratosféricos que cobran artistas y ejecutivos involucrados en este business, hacen un círculo vicioso que ha postrado a esta industria en verdadera alerta roja. Si ha esto le aumentamos la creciente escena de la piratería y los precios ventajosos que las empresas distribuidoras en ocasiones ponen a sus productos, no dejan mucha opción.
Pero la necesidad de seguir en el mapa y crear espacios ingeniosos que brinden una verdadera alternativa para consumidores y creadores, ha dado vida a los negocios independientes. Las disqueras indie promueven la diversidad de géneros musicales dentro y fuera de nuestras fronteras, a manera de dignificación cultural. Procuran una línea de calidad y valor cultural atemporal, sin concesiones a la moda y el comercialismo. Han dedicado sus esfuerzos a promover una escena alternativa y en muchos casos, emergente.
El rollo independiente
La industria discográfica independiente ha tomado tal fuerza que ahora las empresas, y el mismo gobierno, las toma más en serio. Han tenido la capacidad de organizarse, e incluso, ahora las bandas independientes son cartel principal de festivales como el Vive Latino o el Corona Music Fest.
Es innegable que en sonidos como el del rock y la música electrónica, han encontrado la alternativa de supervivencia. “Es muy lamentable que a 15 años del boom del rock nacional no haya más estructura que en aquél entonces. Los grupos no han encontrado una forma eficiente de establecer relación con el mercado. En la medida que los grupos asuman la responsabilidad de su proyecto y establezcan una economía basada en lo que son capaces de generar, va a ser más factible que los grupos prevalezcan”, dijo Jerry Rosado, cabeza del sello Intolerancia.
Pymes que suenan bien
En el ámbito musical, ¿se puede hacer negocio? Por supuesto, para la gente creativa hay espacio en todos lugares. Los integrantes de Austin TV, una de las bandas más importantes de la escena actual, comentaron que el negocio de la música es más de lo que parece. Chato, aseguró: “Todos hemos decidido hacer esto sacrificando otras cosas que podríamos hacer para vivir. Por ejemplo, los que están estudiando o trabajando ya tienen su camino trazado de manera convencional, y aunque todos nos dedicamos a otras cosas la prioridad siempre es Austin.
“Nosotros comenzamos un proyecto, Chio, Xna y yo, hacemos la labor de merchandise para Austin, y a la vez, a otros grupos, les proponemos la manera de crecer. Yo acabo de dejar el empleo que tuve durante tres años para dedicarme a esto”, comentó Chato.
“Austin me empezó a exigir más, y lo que más me gusta no es la esperanza de ganar muchos oros, más bien la idea de seguir a mi corazón y no ir en contra de mi propia persona. Uno como ser humano debe hacerse esas preguntas, debes fluir. En este momento quiero seguir estudiando para mejorar, pero no se qué, mientras tanto, toda mi energía está en la música, y en los proyecto de marketing que traemos con otras bandas. Haciendo crecer este proyecto, he crecido como persona, brutal”, finalizó el músico.
Pequeñas diferencias
Los sellos independientes comienzan a ser una alternativa incluso para los músicos reconocidos. Gasú, guitarrista de Los Amantes de Lola, comentó: “Es increíble que después de tantos años en este negocio ahora todos queremos regresar a lo independiente, pero la verdad es mejor, tener la completa libertad de elegir y crear tu propia propuesta y negocio, sin que nadie le meta mano. Es una satisfacción que no cambiamos por nada. Ahora que Los Amantes estamos de nuevo en la mira, les digo que nunca nos fuimos, sólo nos independizamos y regresamos con nueva energía”, aseguró.
“En verdad, no cambio por nada esta nueva etapa en la que nosotros somos los dueños de nuestro propio negocio. El consejo es que los que comienzan, se vayan por la vía independiente. Siempre es mejor que pagar el precio de ser congelados y menospreciados por una empresa gigante para la que sólo significas un número más”, consideró el músico.
Estrategias de negocio
Dentro del mundo indie, es decir, independiente, hay estrategias de subsistencia, y evidentemente, usar el ingenio es lo que los mantiene a flote. Los sellos independientes graban lo que quieren, cuando quieren y como pueden, utilizando estrategias novedosas. Se asocian con las grandes disqueras para la distribución o realizan tratos directos con las tiendas especializadas o los supermercados. Muchas veces el producto se deja a consignación; establecen alianzas con tiendas para la compra de música a través de Internet, con depósitos, vales o tarjetas de crédito.
Los pronósticos indican que las empresas disqueras independientes continuarán creciendo debido, entre otras cosas, a la piratería y a la descarga de música por el Internet.
Cuestión de números
Como en toda industria, quienes emprenden en el ambiente musical, también saben que la unión hace la fuerza. Por lo cual, en fechas recientes se realizó la mesa de trabajo “Las empresas culturales de la Ciudad de México: Propuestas de las disqueras independientes”, organizado por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
En dicho encuentro, Marissa Canales, directora artística de Urtex Digital Classics, aseguró que “la cultura es un sector fundamental de la economía de México que aporta 7.8% del Producto Interno Bruto (PIB). Por lo cual, los recursos destinados a la producción artística no deben ser los remanentes del presupuesto. Así lo entienden en países desarrollados como Francia, Japón o Inglaterra; en este último se ha definido a la creatividad como “el negocio central de Londres” y ha identificado a las industrias creativas como sectores prioritarios para la economía, las cuales aportan 21 billones de libras y emplean a más de 500 mil personas.
Es un hecho que las sociedades exitosas del siglo XXI serán aquellas que nutran el espíritu de la creatividad y promuevan las actividades culturales. En México, contrario a lo que se pueda pensar, la producción musical es una área de oportunidad que implica talento, tenacidad y visión de negocios.
Si lo deseas, puedes convertirte en empresario en esta rama. Sólo debes decidir si quieres ser músico, DJ, productor, manager o ingeniero de sonido, entre muchas de las actividades que abarca la industria, que a pesar de los rumores, sigue viva y con mucho futuro por delante.
Oportunidades de mercado
¿Cuánto consumimos?
En México, el promedio de gasto en la industria musical es de 10 mil pesos por persona al año, lo que incluye asistencia a conciertos, souvenirs, discos y DVD’s. La compra es de 17 discos por persona por año. Dato esperanzador tomando en cuenta que, a pesar de la crisis y la piratería, el promedio no se ha visto reducido de manera considerable en los últimos cinco años. Tal parece que los mexicanos aún con limitantes, no dejan de consumir entretenimiento.
Costos de producción
Cualquier banda con iniciativa puede producir sus discos. Antes el costo de producción era de 60 a 80 mil pesos por grabación, sin incluir la maquila. Ahora producir un disco te puede salir en promedio en 15 mil pesos con una maquila de1,000 discos.
¿Quiénes participan en la industria?
En cuanto a disqueras, las opciones comerciales más interesantes son Universal Music, EMI, Warner Music y Sony BMG, los grandes del mercado comercial y, en muchos casos, distribuidoras de filiales o empresas pequeñas.
En la rama independiente las más destacadas son: Noiselab, Maia Records, Fonarte, Victim Records, Global e Rack, La Sonaja Producciones, Noise Control, Intolerancia, Discos Konfort, Cero Records, Prodisc, Urtex Digital Classics, Quindecim Recordings, Ediciones Pentagrama, Arteria, JM Distribuidores, Distribuidora Judy, Xquenda, Discos Corasón, Zafra-Música, Astro Discos y Molécula Records.
